La hipertensión es una de las enfermedades más comunes en el mundo, y en parte es ahí donde radica el peligro. A pesar de que la medicina moderna haya avanzado mucho en la lucha contra esta dolencia, muchas personas aún intentan simplemente bajar la presión a la antigua.

Sobre por qué no se debería hacer esto, nos habla el médico cardiólogo Lautaro Rojas:

Hoy en día, todos hablan del estrés, pero no todos consideran las posibles amenazas que conlleva. Sin embargo, el estrés siempre viene acompañado de una liberación de la hormona cortisol, que estrecha los vasos sanguíneos y aumenta la presión arterial. A veces, el paciente dice: "Puedo soportar la presión arterial alta fácilmente. Después del trabajo, me tumbaré y todo estará bien".

Pero la presión arterial alta no se puede manejar de pie, al igual que no se puede intentar reducir la presión arterial por sí mismo con métodos caseros o productos de farmacia.

No se debe hacer caso omiso de la edad y creer que si alguien es joven, no está expuesto a la hipertensión. La crisis hipertensiva puede ocurrir incluso a la edad de 30 años debido al estrés constante. Desafortunadamente, estos casos se registran cada vez con más frecuencia.

La hipertensión inevitablemente afecta al cerebro. El deterioro de la memoria, la atención y la distracción son algunas de las consecuencias de la hipertensión descontrolada.

El corazón sufre y su ritmo se ve alterado, aparece la falta de aliento. Pero hay un riesgo aún más grave: un derrame cerebral o un ataque al corazón. Y el corazón es un órgano clave, de vital importancia para el ser humano.

Bajar la presión arterial por uno mismo es muy arriesgado. Cuando la presión arterial cae rápidamente, el cuerpo activa inmediatamente mecanismos para aumentarla, lo que puede desencadenar una crisis hipertensiva. Las arterias se dilatan, los vasos sanguíneos y el corazón se encuentran en una tensión excesiva y experimentan falta de oxígeno. El riesgo de isquemia, accidente cerebrovascular e infarto se multiplica varias veces.

Cuando nacemos, nuestro sistema vascular funciona en su gran mayoría de manera estable. Se convierte en una autopista de alta velocidad para los nutrientes y los leucocitos, los defensores de nuestro organismo.

Pero cerca de los 30-40 años, prácticamente todas las personas son diagnosticadas con alguna patología del sistema cardiovascular, de diferente gravedad. Y todo esto se debe a nuestro estilo de vida.

Con cada kilo que ganamos, con cada paso que no damos dentro de los límites normales, con cada hora que no dormimos lo suficiente, nuestra autopista de alta velocidad, es decir, nuestro sistema vascular, se desgasta.

Nuestras arterias comienzan a obstruirse, lo que dificulta el transporte de nutrientes a diferentes órganos de nuestro cuerpo. Como resultado, todo el organismo sufre. La producción y el transporte de los glóbulos blancos a través de las arterias contaminadas también se dificulta, lo que les impide llegar eficientemente a los focos de infección. Como resultado, se debilita el sistema inmunológico.

Entonces, ¿qué desempeña un papel clave en la obstrucción de los vasos?

1. Colesterol

Probablemente, el principal enemigo de los vasos sanguíneos. Esto se debe al cambio en la dieta y al estilo de vida sedentario. Por supuesto, el colesterol es producido por nuestro propio organismo de forma natural, pero teniendo en cuenta la abundancia de alimentos grasos en la dieta chilena, el problema se vuelve cada vez más global.

Las placas de colesterol obstruyen el flujo sanguíneo, lo que conduce a dolores de cabeza, problemas en las articulaciones, aumento de la presión arterial y un deterioro general de la salud.

2. Trombos

El trombo es una formación suave de células sanguíneas. La formación de trombos es un mecanismo de protección destinado a restaurar la integridad del vaso sanguíneo dañado. Son masas densas que pueden acumularse en el organismo, con un peso de hasta 1 kg. Pero su peligro radica en que pueden desprenderse del lugar de fijación y bloquear los vasos sanguíneos.

La trombosis es una alteración del flujo sanguíneo en un vaso debido al bloqueo parcial o completo de su luz por un coágulo de sangre. En casos complicados, cuando se afectan las arterias y venas pulmonares, el corazón, el cerebro, esta patología puede conducir a un desenlace fatal.

3. Depósitos de calcio

El calcio es un material de construcción para nuestro sistema óseo, pero es muy peligroso cuando llega al torrente sanguíneo. Esto ocurre a través de los residuos de tabletas y aditivos alimentarios químicos. Con el tiempo, estos residuos se acumulan y se vuelven peligrosos.

El calcio es una sustancia sólida con bordes afilados. Puede perforar fácilmente un vaso sanguíneo durante un espasmo, causado por estrés, o incluso durante un cambio brusco de posición del cuerpo. Muchos accidentes cerebrovasculares son causados precisamente por acumulaciones de calcio en los vasos sanguíneos.

El principal problema es que incluso si usted lleva un estilo de vida saludable, a los 50 años todavía se acumulan depósitos en tus vasos sanguíneos. Por eso, enfermedades como la hipertensión se consideran relacionadas con la edad. Después de todo, nadie propone limpiar los vasos sanguíneos y estar sano a cualquier edad.

Los vasos sanguíneos obstruidos conducen a enfermedades muy graves y la hipertensión es solo el primer indicio de que algo no está bien con sus vasos sanguíneos. Y mientras usted intente reducir la presión arterial elevada con tabletas farmacéuticas o métodos populares, la condición de sus vasos sanguíneos solo empeora.

¿PERO QUÉ HACER ENTONCES? ¿CÓMO LIMPIAR LOS VASOS SANGUÍNEOS?

Finalmente, la medicina moderna ha logrado crear una fórmula que no solo puede ayudar a reducir la presión arterial, sino que también a restaurar completamente el sistema cardiovascular. De esta manera, se mejora el estado general de todo el organismo.

Esta fórmula se materializa en el producto Kardinol, donde tres componentes activos clave pueden ayudar a normalizar el funcionamiento de los vasos sanguíneos, limpiarlos de residuos de calcio, destruir placas de colesterol y evitar la formación de trombos.

Omega-3 es un grupo de ácidos grasos poliinsaturados que tienen muchos efectos positivos en la salud de los vasos sanguíneos. Pueden reducir el nivel de triglicéridos en la sangre, que están relacionados con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, prevenir la formación de coágulos, favorecer la recuperación de los vasos sanguíneos y mantener la presión arterial normal.

Camu-camu. Los antioxidantes presentes en estas frutas pueden ayudar a proteger las células de los vasos sanguíneos contra daños, inflamaciones y estrés oxidativo. Además, el camu-camu puede ayudar a mantener una circulación sanguínea normal.

Las bayas de açaí pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol total y de colesterol LDL "malo" en la sangre, liberando los vasos sanguíneos de placas de colesterol. Los antioxidantes y los nutrientes presentes en las bayas de açaí pueden ayudar a mejorar la circulación sanguínea y normalizar el flujo de sangre.

El jengibre. El consumo regular de jengibre puede ayudar a estabilizar la presión arterial, mejorar la circulación sanguínea mediante la dilatación de los vasos sanguíneos y romper las placas de colesterol.

Es importante destacar que todos estos componentes son de origen natural. La cuestión es que los compuestos químicos de los análogos farmacéuticos a menudo causan reacciones alérgicas y no son bien tolerados por el organismo.

Conociendo la composición de Kardinol, se puede decir con confianza que este producto es seguro, ya que es 100% natural.

¿CÓMO FUNCIONA?

En el primer mes, Kardinol puede ayudar a limpiar tus vasos sanguíneos hasta un 70%. Puede ayudar a eliminar hasta 2 kg de placas de colesterol, hasta 1 kg de trombos y 400 g de calcio.

Los dolores de cabeza desaparecerán, así como los zumbidos en los oídos, y se estabilizará la presión arterial. El cerebro, al recibir una nutrición adecuada gracias a los vasos sanguíneos limpios, comenzará a funcionar mejor. El sueño se estabilizará, aumentará la productividad en los asuntos y en el trabajo.

La normalización de la circulación sanguínea le puede ayudar a recuperar la ligereza del movimiento que había olvidado durante mucho tiempo. No importa cuántos pasos des en un día, sus piernas dejarán de cansarse y doler al final del día.

Su organismo recibirá todos los nutrientes de los alimentos, ya que su transporte a través de los vasos sanguíneos no enfrentará ninguna amenaza, lo que significa que notará una disminución del apetito.

¡Esto es realmente cierto! ¡Kardinol ya ha cambiado para mejor la vida de miles de personas!

Cuando vi por primera vez la composición de Kardinol, supe que era un producto que realmente podía ayudar. No soy escéptico con los suplementos, ya que este método de apoyo al organismo se utiliza ampliamente en otros países más desarrollados. Especialmente si la composición es tan buena como la de Kardinol.

Tenía un pequeño lote de los fabricantes, y recomendé este producto a mis pacientes. Después de un mes, ¡la cantidad de mis pacientes habituales disminuyó en un 99%! Aquellas personas que venían mensualmente a quejarse de presión arterial ya no aparecían.

Llamé a aquellos que hicieron un ciclo de uso Kardinol durante un mes, y todos confirmaron que los dolores de cabeza, los cambios en la presión arterial, el zumbido en los oídos y otros síntomas habían desaparecido. No esperaba estos resultados. Este suplemento superó todas mis expectativas".

El doctor Lautaro Rojas amablemente nos proporcionó los contactos del fabricante, y también decidimos ayudar en la difusión de este innovador producto.

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